Reelección de Diputados, en vilo
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 29, Jun 2020Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- La confección del traje corresponderá al
- INE y las reglas auguran acalorados debates
En materia política, México sigue dividido y sus principales actores, los dirigentes nacionales y estatales de los partidos, los legisladores federales y locales, los tres niveles de gobierno, nadie abona o pone de su parte como para devolver la estabilidad que el país necesita en el rubro político y lo grave de esta situación es que los mexicanos ya tenemos a la vista el año electoral 2021 y el ambiente no parece ser diferente al proceso comicial reciente, donde el resultado fue contundente para algunos pero negativo para la mayoría, porque la nación se dividió en sectores de buenos y malos, y si por esa mayoría fuera, lo mejor, tal vez, sería no ir a elecciones con ese ambiente de confrontación y rencor.
Claro, habrá quien diga, una vez que pasemos la pandemia, “ya la hicimos”, como una extensión de la coloquial expresión “ya chingamos”, pero la realidad nos hace pensar en escenarios nunca antes vistos en materia económica, de inseguridad y de tipo político, así que para quienes creen que después de la tormenta viene la calma no hay que adelantar vísperas, porque desde las redes sociales ya hay quienes nos advierten que lo peor aún esta por llegar.
En materia política, por ejemplo, ya tenemos un debate por la lucha electoral que se avecina, y todo indica que éste será una versión de lo experimentado hace dos años, aunque reforzado, y si ya de por sí la ciudadanía está confrontada, imaginemos lo que viene.
Y como para dar más potencia a los motores, que nunca se detuvieron después del proceso comicial de 2018, a la vista tenemos una discusión por la figura de la reelección legislativa, y ese debate cada vez se hace más intenso, primero porque el poder Legislativo no concluyó la chamba de poner los puntos sobre las íes en las reglas para ser reelectos y segundo porque en su propuesta, ya aprobada en la Cámara de Diputados, quisieron sorprender al respetable y se despacharon, como dicen en mi pueblo, con la cuchara grande, ya que pretendan ser electos para el mismo cargo, por un periodo consecutivo, sin separarse del cargo.
Lo hasta ahora aprobado como regla secundaria, señala que las y los legisladores federales que pretendan ser electos para el mismo cargo por un periodo consecutivo podrán participar en el proceso electoral sin separarse del cargo, para lo cual deberán observar estrictamente las disposiciones legales y normativas dirigidas a preservar la equidad en las contiendas políticas, así como el uso eficiente, eficaz, honrado, transparente e imparcial de los recursos públicos.
La propuesta establece cumplir con las obligaciones inherentes a su encargo; abstenerse de incurrir en actos anticipados de campaña y precampaña; no participar en reuniones de proselitismo político durante el tiempo en que están obligados a concurrir a sesión de la cámara correspondiente, de conformidad con lo dispuesto por los artículos 63 y 64 de la Constitución. Y como para no dejar pasar una posible sanción, los diputados advirtieron que “la contravención por cualquier legisladora o legislador de esto último generará el descuento de la dieta correspondiente al día en que se presente la inasistencia”.
Y saben qué, la minuta, que aún permanece en el Senado de la República y no fue atendida en tiempo y forma para su análisis, discusión y posible aprobación, sentencia que lo ahí establecido deberá cumplirse en los términos y condiciones que determine la ley.
Entonces, como esa ley reglamentaria no existe, en términos de legalidad el elector podrá suponer que si no hay reglas no hay reelección legislativa, pero no, el asunto no es tan fácil, porque ahora resulta que esa tarea, que no terminó el Legislativo, corresponderá resolver al instituto Nacional Electoral, órgano que en principio tampoco parece compartir la visión de quienes pretenden reelegirse sin dejar la curul y eso, de entrada, ya los confronta con un poder legislativo mayoritariamente integrado por el partido en el poder.
Qué va a pasar en el tema de la reelección legislativa?, la repuesta no la podemos cantar aún, sin embargo se da por hecho que cualquiera que sea la decisión final será impugnada por alguna de las partes en conflicto, así que para aquellos que al calor de una votación ganada en el pleno de la cámara baja, en marzo pasado, gritaron “ya la hicimos”, por decir lo menos, será mejor que se serenen porque en este tema el electorado está en vilo y cualquier cosa puede pasar de aquí al primer día de septiembre, fecha en que oficialmente se da el banderazo de salida a la carrera electoral 2021.
VA MI RESTO.- Hay que recordar que en la reforma al artículo 59 constitucional, hecha en 2014, se estableció que: “Los Senadores podrán ser electos hasta por dos periodos consecutivos y los diputados al Congreso de la Unión hasta por cuatro periodos consecutivos. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que los hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato” y esa premisa también aplica para los diputados federales que podrán poner a prueba su trabajo realizado mediante la inédita figura de la reelección legislativa, con el inconveniente que de que aún no hay reglas, e decir que para la confección de ese traje político-electoral el debate apenas empieza, y hasta ahí porque como veo doy.