Las vacunas
¬ Augusto Corro martes 26, Ene 2021Punto por punto
Augusto Corro
Cuando el gobierno anunció la llegada de las vacunas contra el coronavirus Covid-19 se registró una especie de alivio, pues ya se tendrían las armas adecuadas para enfrentar la pandemia. Conforme transcurrieron los días, esa esperanza de inmunización desapareció poco a poco, porque pasa el tiempo y la mayoría de la población ignora la hora, el día, el mes y el lugar donde le atenderán para vacunarlo.
En esa incertidumbre por el desconocimiento del llamado cronograma se le suma la falta de información oficial sobre la adquisición de las vacunas anti-Covid-19, pues alarmó que el laboratorio difiriera la entrega del antídoto en el tiempo acordado. A la nula capacidad de informar de las autoridades, el rumor llenó ese vacío y no se sabe que nos deparará la estrategia del gobierno que dese el inicio mostró errores importantes, en la lucha contra el coronavirus.
Primero, desestimó la gravedad de la pandemia, luego despreció el uso del cubrebocas, a regañadientes empezó a realizar pruebas, la implementación tardía del color rojo del semáforo sanitario, así como una política sanitaria que dejaba a criterio de las personas el mantenerse aislada o salir a invadir las calles principales de las ciudades por cualquier motivo.
¿Debido a un sinnúmero de obstáculos en la adquisición de las vacunas nos asegura que el gobierno mexicano va en el camino correcto? La cantidad de vacunas con la que empezó la campaña es insuficiente. Son pocas. Y debe agregarse que los laboratorios por las cuestiones que usted puede imaginarse van lentos en el cumplimiento de fechas de entrega del medicamento.
Por el rumor que lleva mensajes negativos, la población busca información por todas partes. En algunos casos se pregunta sobre la noticia en el sentido de que se abrió la importación de vacunas y los lugares dónde se pueden conseguir. Piden los nombres de los hospitales, farmacias, consultorios, etc., dónde ir a vacunarse. Las autoridades sanitarias responden con lentitud y verdades a medias las preguntas que se les formulan.
Fueron las propias autoridades las que en la euforia por la llegada de las vacunas dijeron que para el mes de marzo ya estaría vacunada toda la población de adultos de la tercera edad. Esa esa idea empezó a desdibujarse al saber que los laboratorios no podrán cumplir con sus convenios de entregar el antídoto en fechas determinas. Esa demora en la entrega de la vacuna podría llevar a las empresas a enfrentar problemas de tipo legal, como ocurre en Italia.
En diciembre, México se convirtió en el primer país de América Latina en recibir tres mil dosis de vacuna Pfizer contra la Covi-19, además se firmó un convenio para la entrega de un total de un millón 420 mil 575 dosis para enero 31. Solo que después cambiaron las expectativas porque no se cumplió el convenio por la empresa que produce la vacuna. Será el próximo mes de febrero cuando se reanude la recepción de dosis.
También se supo que los laboratorios AstraZeneca también retraso su producción. Las empresas argumentan que las demoras obedecen a los ajustes en las plantas para aumentar la producción. Poco les importa la incertidumbre que provoca en millones de personas angustiadas porque no se ve una solución real y rápida a la pandemia. No contar con la vacuna nos lleva a los inicios de la pandemia: más contagios y sobre todo el aumento en los decesos por Covid-19.
El repunte de los contagios y la crisis económica que vivimos no se detienen. Crece la angustia y el futuro se vuelve incierto. Las autoridades están obligadas a revisar la estrategia contra la peste, mientras se regulariza la entrega de vacunas. Su trabajo debe incluir información veraz y oportuna para disminuir el hartazgo de la población que no encuentra la salida a la crisis sanitaria y económica que padecemos los mexicanos. ¿Usted qué opina amable lector?