Nada para nadie
Freddy Sánchez martes 15, Ago 2023Precios y desprecios
Freddy Sánchez
“En la política las circunstancias mandan”…
Esa vieja creencia entre ciertos políticos continuamente acredita su autenticidad.
A quiénes entonces favorecen actualmente las circunstancias en México ante el cambio presidencial y la renovación de cargos electorales para el próximo año. En la convicción de no pocos, el partido el gobierno con la fuerte influencia nacional de Andrés Manuel (y todos los controles institucionales bajo su dominio) es inequívocamente el partido a vencer, lo que se ve francamente difícil, si no es que imposible en cuanto al desplazamiento de Morena del poder presidencial.
Ahora que tampoco hay que menospreciar la fuerza de la oposición unida, porque este medio de subsistencia al que han recurrido los otrora grandes de la política (en plena debacle desde la pasada elección presidencial) les permitió recuperar vitalidad en las elecciones intermedias.
La pérdida de la mitad de la Ciudad de México y el no haber logrado consolidar una mayoría absoluta en la Cámara de Diputados para reformar la constitución (sin cambiarle ni un punto ni una coma a las iniciativas presidenciales como ha sucedido con otras reformas legales) tuvo una doble repercusión en detrimento de la capacidad de gobernar para el partido de Andrés Manuel. Y es que por una parte se le puso un freno a la idea de que Morena sigue siendo un partido invencible y arrollador en las urnas, además de que sus adversarios políticos del PRI, PAN y PRD (en desgracia total al ganar Morena lo que ganó en el 2018) prácticamente encontraron una especie de “tabla de salvación”.
Porque ese frente de opositores que recuperó el aliento a mediados del sexenio con los triunfos electorales obtenidos en la actualidad cuenta con la posibilidad de volver a dar una sorpresa para el 2024 frustrando el “plan C” del presidente López Obrador con respecto a “borrar” del mapa electoral a la oposición.
Y es que si bien la gente que se mantiene firme en su apoyo a Morena suma millones para lograr que quien sustituya a AMLO en la Presidencia siendo naturalmente del mismo partido no enfrente oposición capaz de frenar sus proyectos legales, eso dependerá de que otros millones de críticos y no satisfechos con el gobierno en turno lo permitan cuando llegue en momento de ir las urnas.
Así las cosas, justo es reconocer que no obstante el malestar social de una parte de los integrantes de la sociedad, en virtud a decisiones de gobierno mal vistas por sus efectos negativos en contra de distintos segmentos de la población, el poder seductor del Presidente entre sus seguidores, por su autodefensa en todas sus mañaneras, deteriorando con sus dichos la imagen de sus opositores y, obviamente, el gran efecto a favor del gobierno de los programas sociales se han encargado de que Morena goce de un imponente apoyo popular.
Y ante ello, lo que se aprecia y es también innegable en la parte contraria del gobierno es que mucha gente se ha declarado decididamente dispuesta a votar en contra del partido gobernante. En ese contexto, es menester subrayar que las circunstancias para cuando se aproxime en tiempo de elegir la nueva figura presidencial y los puestos de elección popular a disputarse, necesariamente serán un factor que influirá en los resultados. Así que por ahora lo único cierto es que, en torno al 2024, no hay nada para nadie.