Gasto de los mexicanos más pobres para cuidar su salud aumentó 50%
Miguel Ángel Rivera jueves 14, Sep 2023Clase Política
Miguel Ángel Rivera
Uno de los innegables fracasos de la llamada Cuarta Transformación ha sido sin duda en materia de salud pública, pues fracasó el denominado Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) que, finalmente, fue desaparecido porque no pudo llenar el hueco dejado por el Seguro Popular, creado por el PAN, por lo que sus recursos, pero sobre todo sus obligaciones, fueron traspasadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), erigido por el PRI.
Esto quedó muy en claro en la sesión de ayer de la Cámara de Diputados, en donde el ahora diputado de Movimiento Ciudadano (MC), antes funcionario de gobiernos surgidos del PAN y del PRD, Salomón Chertorivski, hizo un balance acerca de los malos resultados del actual gobierno federal, a pesar de que su líder y guía, en presidente Andrés Manuel López Obrador, repite en sus muy frecuentes “informes” y, sobre todo en sus conferencias mañaneras, resultados supuestamente positivos.
El diputado de MC y ahora aspirante al gobierno de la Ciudad de México —donde ya fue un exitoso secretario de Desarrollo Económico— presentó dos iniciativas, una para reformar el artículo 4 de la Constitución General de la República y la segunda para adicionar la Ley General de Salud para impulsar un sistema universal de seguro popular.
Aunque ese proyecto, respaldado por los integrantes del grupo parlamentario de MC, resulte mejor que los frustrados cambios realizados por la llamada Cuarta Transformación, seguramente no prosperará, al menos durante lo que resta del actual sexenio y mientras que Morena y sus rémoras tengan el control en las dos cámaras del Congreso de la Unión. Lo que no pudieron evitar, a pesar de sus gritos y abucheos, los diputados del bloque oficialista fue el retrato del panorama negativo que seguramente heredará la actual administración pública, pues lo que no pudo cambiar en cinco años, seguramente no lo podrá corregir en los siguientes 12 meses y quince días, periodo en el cual la prioridad serán las elecciones para asegurar la permanencia en el poder de los herederos de López Obrador.
“Los saludo a todas, a todos, con enorme gusto a mis compañeros, con el aprecio y el cariño que se les tiene. Celebro profundamente que haya subido el salario mínimo. Celebro profundamente que tengamos una pensión universal para adultos mayores”, dijo Chertorivski Woldenberg, de inicio, en lo que parecía un elogioso discurso a favor de la llamada Cuarta Transformación. Sin embargo, enseguida cambió el rumbo:
Aumentaron los salarios, pero se gasta más en medicinas
“Pero no puedo celebrar que gran parte de esa mejora en ingresos se tenga que destinar al pago del acceso a la salud. Creció en estos años 31 por ciento el gasto de bolsillo, lo que cada quien pone para su salud. Creció en 50 por ciento el gasto para la salud de los hogares más pobres de nuestro país. Seis de cada diez mexicanos hoy se tienen que atender en consultorios privados porque no tienen acceso a los servicios de salud. Un millón de hogares mexicanos se están empobreciendo cada año por no poder financiar el gasto de una enfermedad catastrófica.
“Este problema tiene su origen muy marcado y claro, la desaparición del Seguro Popular. Seguro Popular que atendía a 53 y medio millones de mexicanas y mexicanos, que nunca fue perfecto, que claro que había que mejorar, pero que daba la base con lo que se había construido para poder aspirar a un mejor sistema. Se optó por el borrón y cuenta nueva, y por un experimento que ha costado vidas.
“Hoy, no contentos con ese experimento primario que fue el Insabi, se intenta un nuevo invento con el IMSS Bienestar. Va a fracasar, como fracasó el experimento anterior. Y el problema de este fracaso es que costará la vida de millones de personas y el bienestar de muchísima gente.
“Hoy en México tenemos 50 millones de personas sin acceso a la salud. Para muestra un botón. Perdimos cuatro años de esperanza de vida al nacer. No había pasado eso desde que terminaron las guerras en la Revolución Mexicana”, dijo Chertorivski, quien es un acabado representante de todo lo que López Obrador ha denigrado durante su mandato por formarse en universidades extranjeras.
El ahora diputado de MC tiene los grados de licenciado y maestro en economía por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y maestro en políticas públicas por la Universidad de Harvard y ha sido profesor del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE) —que ha sido objeto de toda clase de ataques de la llamada Cuatroté— así como del ITAM y en la Universidad Iberoamericana.
Además, fue titular del desaparecido Seguro Popular, creación del ex secretario de Salud, Julio Frenk Mora, quien no sólo tuvo parte de su formación académica en universidades extranjeras, como la Michigan, sino que ahora es rector de la de Miami, todo lo cual se considera pecado capital en la llamada cuarta transformación.
En su exposición, el diputado Chertorivski, no sólo criticó las fallas en materia de salud del actual régimen federal, sino que también advirtió de equjivocaciones en la capital del país:
“Por poner un ejemplo, citando esta gran Ciudad de México, donde quien se decía gobernar, pero fue candidata, está hoy en este palacio, que lo escuche bien, en la Ciudad de México, la ciudad que tiene la mayor infraestructura, el mayor personal médico y de enfermería de nuestro país, hay 2.6 millones de chilangas y chilangos sin acceso a la salud… se dejaron de realizar 3.1 millones de consultas externas, se dejaron de hacer 1.7 millones de consultas de alta especialidad, disminuyeron 40 % las mastografías y 40 % las intervenciones quirúrgicas.
“Cada día que pasa hay gente que pierde la vida”, remató el legislador al indicar el propósito de las reformas que presentó a nombre de su grupo parlamentario.
“Por eso, hoy, la bancada naranja viene a proponerles a ustedes que no pensemos en el pasado, que lo que hoy tenemos está peor, que pensemos en el futuro posible, qué sistema de salud sí podemos construir para la siguiente generación.
“Y hoy les decimos: Podemos construir uno más seguro y más popular, porque establecerá en la Constitución un seguro de salud universal, público y plural; un seguro más popular, porque pondrá su centro en la prevención; uno más seguro y más popular, porque permitirá que los mexicanos se atiendan en todo el sistema sin importar si son hospitales públicos, privados o de la seguridad social.
“Uno más seguro y más popular, porque asegura los recursos necesarios, interpone primero la salud y después el recurso que se necesita; uno más seguro y más popular, porque los mexicanos van a dejar de poner de su bolsillo y podrán atenderse de las enfermedades que más los aquejan.
“Uno más seguro y más popular, porque inyectará 7 mil millones de pesos adicionales con un porcentaje del IEPS de tabaco, alcohol y refrescos a la salud de los mexicanos; uno más seguro y más popular, porque construirá sobre la base de la tecnología”, expresó el legislador, quien propuso a compañeros y adversarios:
“No hay país desarrollado que no centre su desarrollo en la columna vertebral que es la salud. Dejemos de pensar en el pasado. Dejemos de pensar en el presente. Pensemos en el futuro inmediato. Como decía Platón: Donde quiera que se ama el arte de la medicina se ama también a la humanidad. Si somos humanistas pensemos primero que nada en la salud de las y los mexicanos”.
Muy costosa la renta de hospitales, pero no se piensa expropiarlos
Mientras tanto, como parte de la defensa de su política en materia de salud, López Obrador informó en su mañanera que su gobierno ha intentado comprar nueve hospitales que son propiedad de particulares, pero que rentan los organismos oficiales de salud, el IMSS y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE)
El jefe del Ejecutivo dijo que los propietarios de tales nosocomios no aceptan vender, sino seguir alquilándolos, aunque aceptan reducir las rentas.
Reveló que el costo del alquiler asciende de 5 mil 651 millones y por todo el tiempo del contrato la cifra supera los 93 mil millones de pesos. Por ello, dijo, su administración encargó un avalúo y los especialistas determinaron que el precio de los nueve hospitales, incluidos equipos, es de 5 mil 242 millones de pesos, es decir, menos de lo que se paga anualmente en rentas.
Aseguró que no piensa expropiarlos, sino comprarlos a su valor real.