Todos se dan cuenta menos nosotros
¬ Luis Ángel García miércoles 31, Ene 2024Por la Derecha..!
Luis Ángel García
Una sociedad en constante aletargamiento, conformista y resignada a soportar malos gobiernos parece no darse cuenta del peligro que representa la imposición de un sistema cuasi dictatorial que incuba el retroceso de un país y el mantenimiento de la población en márgenes de pobreza y sin posibilidades de desarrollo. Todavía bajo los efectos del proyecto mesiánico que ofrecía la reivindicación de los desposeídos, la cárcel para los corruptos y las bondades de un Estado paternalista que todo lo provee a cambio de lealtad, los ciudadanos no advierten la realidad que los envuelve y los condena -como la película-, a estar atrapados sin salida. Por más advertencias que hacen los organismos internacionales, los investigadores y académicos locales y extranjeros y la propia opinocracia, los mexicanos se mantienen en el sopor de un populismo trasnochado, pero eficaz para manipular las conciencias, de la 4T.
Sin embargo, el estilo personal de gobernar de la actual administración empieza a incomodar y preocupar a los norteamericanos, quienes resienten los efectos de un Estado casi fallido. El Baker Institute de la Universidad de Texas analiza desde 2020 el estatus que guarda la relación entre Estados Unidos y México.
En el informe 2024, el centro académico precisa que el tabasqueño prefirió alinearse con los regímenes populistas de América Latina, pero esa estrategia populista significó -advierten-, el debilitamiento de las instituciones del Estado mexicano y la pérdida del equilibrio entre poderes y la función de la rendición de cuentas, lo que no se veía desde los noventa. Este debilitamiento institucional, junto con la centralización en la toma de decisiones, provoca un alto grado de incertidumbre y arbitrariedad en la definición de políticas públicas.
Destaca el informe de los académicos americanos el debilitamiento del sistema electoral y pone en duda la certeza de los resultados de los comicios del 2 de junio. Ven como muy probable que el Presidente y su partido interfieran en las votaciones para tratar de asegurar la victoria de sus candidatos. Agregan que las elecciones serán menos libres y justas que las anteriores y posibilita el camino a un gran descontento social -lo cual dudo, por la apatía idiosincrática que nos caracteriza y lo agachones que somos-, después de la jornada comicial. El panorama propuesto por el organismo asociado a la Universidad de Texas prevé la retracción de posibles inversionistas. También visualizan, entre otros escenarios, que el próximo gobierno enfrente retos insuperables, por la disminución crónica de inversiones en educación, salud e infraestructura, además de la extinción de una burocracia altamente calificada y la contratación de incompetentes funcionarios, pero leales políticamente.
El Baker Institute ve como un riesgo en la relación bilateral la militarización de las funciones civiles, cuya eficacia es altamente cuestionable. Las megaobras del gobierno -apuntan- no son alternativas para subsanar la baja inversión en el resto de los sectores de la economía que la requieren; además, el área energética está en una profunda crisis de difícil solución. Preocupa a los norteamericanos la corrupción y el crimen organizado, ya que consideran que los latrocinios se han incrementado de forma considerable durante la administración de la 4T y que es evidente la connivencia de los delincuentes con los gobiernos morenistas y su injerencia en los comicios.
Según el documento académico, irrita a la Casa Blanca la política exterior mexicana, sobre todo la falta de colaboración para frenar la crisis migratoria, el flujo de fentanilo, los desacuerdos en materia energética y la permisividad para que China introduzca acero y aluminio a la Unión Americana a través de nuestro país. Tampoco es bien vista, como se expresó al principio de esta colaboración, la aceptación de regímenes dictatoriales como Cuba, Nicaragua y Venezuela o el apoyo a Rusia en el conflicto con Ucrania.
Mientras tanto, una obnubilada sociedad está más preocupada por no perder las dádivas del gobierno que por sobrevivir entre los límites de la pobreza y la miseria.