Se disparan en Quintana Roo los precios de los combustibles
* Destacadas, Finanzas miércoles 15, Ene 2025
Cancún.– En el inicio de este 2025, los residentes y visitantes de Cancún han sido testigos de un alza significativa en el costo de la gasolina, lo que ha provocado una fuerte presión en los bolsillos de la ciudadanía. Los aumentos han sido constantes y han llevado al precio de la gasolina regular a alcanzar 25.94 pesos por litro, mientras que la Premium se sitúa en 26.69 pesos y el Diésel en 27.84 pesos.
Según datos recopilados por la Comisión Reguladora de Energía (CRE), los precios han aumentado un promedio de 35 centavos por litro en comparación con diciembre de 2024, destacándose la gasolina regular, que ha subido 65 centavos, seguida de la premium con 58 centavos. Este escenario posiciona a Quintana Roo entre los estados con precios de gasolina más altos a nivel nacional.
Los consumidores locales se quejan de que, sin los estímulos fiscales aplicados en otros estados, el precio del combustible se vuelve insoportable, sobre todo en los meses de enero y febrero, cuando los aumentos son más notorios. Ante este escenario, muchos conductores han optado por buscar rutas más cortas y eficientes para ahorrar en el uso de combustible.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha llevado a cabo varios operativos para monitorear los precios en las gasolineras, pero el impacto inmediato hasta ahora ha sido limitado. Se han detectado casos donde las concesionarias han vendido gasolina a precios más altos que los autorizados, sin justificación aparente, lo que ha llevado a la Profeco a iniciar procedimientos administrativos contra ellos.
La esperanza de los consumidores radica en la próxima aplicación de estímulos fiscales por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que podrían aliviar un poco la carga financiera de la población con precios más accesibles.
La elevada carga fiscal y la falta de incentivos fiscales han convertido a Cancún en uno de los lugares donde llenar el tanque del coche se ha vuelto un lujo. Esta situación obliga a la ciudadanía a planificar mejor sus desplazamientos y a buscar alternativas más económicas en su día a día.